Tres intentos de pacificar y liberalizar al estamento militar español por parte del gobierno josefino

Abstract

The attempt to bring peace to Spain on the part of goverment of José I and to extend the principles of the French Revolution to every part of life could not leave the army aside and thus we study three of the different but complementing measures taken by José¿s I goverment aimed at filfilling such objectives. First, the serious situation of the retired, pensioners, widows and army pensioners mirrors the evident general impoverished situation too. We will show the different meaures taken by the goverment of José I to amend this situation. He will completely fail in it though. Second, the wish to separate the civil and military administrations will lead to the Bill discussed during the last days of October 1809 to create the rank of War and Distribution supervisor responsible for the economic administration of every branch of the army. At the same time the rank of army quatermaster will be abolished but not its title. Last, we will supply information about Gonzalo O¿Farrill¿s report and plan for a Bill that reflects the need to destroy the old rank-biased law system for a new one that abolish the privileges and exemptions in the old system that will treat soldiers as citizens serviing the flag, with inalianable rights, among them the most important one the right to a fair and equal trial. At the same time, it should stop the interference of the army higher ranks in the region of civil life opposing to it, as a political weapon of the goverment, the ordinary law and courts.

El intento de pacificar a España por parte del gobierno josefino y de trasladar a todos los ámbitos de su vida los principios emanados de la Revolución Francesa no podían olvidar al estamento militar, y de este modo hemos estudiado tres de las distintas y complementarias medidas encaminadas a conseguir tales fines. De una parte, la evidente depauperización generalizada, se refleja también, gravísimamente, en los jubilados, retirados, viudas y pensionistas militares; mostraremos los diferentes mecanismos arbitrados por el gobierno josefino para paliar tal situación, si bien fracasará estrepitosamente en tal intento. En segundo lugar, el deseo de separar la administración militar y civil se plasmará en el proyecto debatido en los últimos días de octubre de 1809 acerca de la creación del cuerpo de Comisarios Ordenadores y de Guerra encargados de la administración económica de todos los ramos del ejército al mismo tiempo que se suprimirá el grado de Intendente de Ejército aunque no su título. Por último hablaremos del informe y proyecto de decreto de Don Gonzalo O¿Farrill sobre la necesidad de destruir el viejo sistema judicial regimental a favor de uno nuevo en el que se supriman cuantos privilegios y exenciones pudieran existir dentro de su fuero y tratando al soldado como a un ciudadano bajo las banderas, con unos derechos naturales inalienables, de entre los cuales, el primordial es el derecho a una justicia justa e igualitaria, al mismo tiempo que se frena la injerencia de los jefes militares españoles en la esfera de la vida civil, al esgrimir como arma política del Gobierno, frente a tal tendencia, las leyes y tribunales ordinarios.