Actualmente la sociedad española está viviendo toda una serie de cambios demográficos y sociales que están dando pie a un cambio en la estructura de población, generando un proceso de envejecimiento notable en nuestras ciudades y pueblos. Desde la Dirección General del IMSERSO y sus últimos datos publicados en el Informe 2016, Las Personas Mayores en España, Datos Estadísticos Estatales y por Comunidades Autónomas, se habla del gran peso que las personas mayores han ganado gracias a las mejoras en las condiciones de vida, reflejado en los sistemas y políticas de protección y el aumento de la esperanza de vida. Las personas mayores de 65 años en España representan el 18’7% de la población total (8.701.380 personas) y de este sector, aproximadamente un 6% tenían más de 80 años (2.792.616 personas), además, es Castilla y León, la que se encuentra a la cabeza como la Comunidad Autónoma con mayor población mayor de 65 años con un 24,45% de su población total (598.328 personas), y en su capital, Valladolid, solo en su municipio, suponen más de 25% de su población total (77.182). Todo ello, ha ocasionado que las Políticas Sociales y de Protección se tengan que reajustar a la nueva realidad, para cubrir las demandas, necesidades y problemáticas de este sector de la población, tan amplio y a la vez tan heterogéneo. Es aquí, donde desde los Servicios Sociales y las Instituciones Públicas han de poner mayor énfasis, generando recursos, servicios y prestaciones que den respuesta de manera integral y efectiva a la autonomía y prevención de la dependencia de las personas mayores a través de los Catálogos de Servicios Sociales de cada Comunidad Autónoma.
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