El dinero y las finanzas personales: una herramienta esencial para el alumnado de 4º de ESO

Abstract

La Economía es un pilar fundamental dentro de cualquier sociedad, por lo que es realmente importante que los alumnos comprendan a la perfección determinados conocimientos que van a ser básicos. A lo largo de su vida el alumnado tendrá que tratar en numerosas ocasiones con empresas como los bancos, en las que entre el vocabulario utilizado destacan las TAE, los intereses simples y compuestos, las tarjetas de crédito y débito, los préstamos o los créditos, por lo que será relevante que conozcan sus significados. Que la economía siempre está en boca de todos es algo que no se puede negar. Desde una simple conversación en un bar entre unos amigos, hasta aparecer todos los días en las noticias. Y es precisamente esto lo que hace que sea una asignatura fundamental. ¿En cuántas ocasiones aparecen noticias sobre asignaturas como literatura o lengua castellana? ¿En que conversación cotidiana se habla de la sintaxis o de la morfología de las palabras? Hay asignaturas que no tienen mayor utilidad que la que se aplica en las aulas y sin embargo tienen un peso en el currículo desmesurado. Se está enseñando a los estudiantes una cantidad ingente de conocimientos que tras salir de las aulas nunca vuelven a ser utilizados, mientras que materias como la economía, cuyos términos y saberes aparecen en cada uno de los días de los seres humanos, desde que nacen hasta que se mueren, están siendo relegadas a un segundo plano. En los últimos años se han producido numerosas estafas bancarias, como el caso de las preferentes, de las hipotecas multidivisas o de las cláusulas suelo que han afectado a miles y miles de personas en nuestro país y que en la mayoría de los casos se podía haber evitado si los individuos hubieran dispuesto de la información y los conocimientos necesarios para saber que aquello que les prometían era claramente un engaño. Todo esto deja bastante clara la importancia del estudio de la economía, pero por si no fuera poco hay que tener en cuenta todas las comunicaciones bancarias que se reciben a lo largo de la vida y que muchos individuos no son capaces de entender.