Estilo de vida en el paciente con insuficiencia cardiaca. Cuidados enfermeros. Revisión bibliográfica narrativa

Abstract

Introducción. Actualmente, la insuficiencia cardíaca es una auténtica y emergente epidemia cardiovascular. Con los años, la enfermedad ha mejorado y evolucionado gracias a los avances en el diagnóstico y el tratamiento, pero por su alta incidencia y prevalencia, el pronóstico es desfavorable. El estilo de vida es un factor determinante en la salud, aunque muy subestimado. Su enfoque en la prevención y en el tratamiento culmina con buenos resultados de salud. Objetivos. Analizar, mediante una revisión bibliográfica narrativa, el estilo de vida que llevan los pacientes diagnosticados con insuficiencia cardíaca, haciendo hincapié en la importancia del autocuidado, el impacto de la dieta y la influencia del ejercicio físico en la vida diaria de la persona. Metodología. Se ha realizado una revisión bibliográfica narrativa de publicaciones científicas en diferentes bases de datos como Dialnet, CuidenPlus y Medline, empleando unos criterios de inclusión y exclusión. Se seleccionaron 36 artículos para la revisión. Resultados y Discusión. Una modificación en el estilo de vida del paciente como parte del tratamiento y prevención ha demostrado tener unos buenos resultados de salud. La prioridad en el autocuidado determina la disminución de la morbilidad, la mortalidad y la mejora en la calidad de vida. Con respecto a las recomendaciones del autocuidado más comunes, la restricción de sal y de líquidos son propuestas cuestionables, por eso un cambio en la dieta, en su totalidad, se ha visto más beneficiosa que enfocarse en los aspectos más concretos. El ejercicio físico, al igual que la dieta, muestra un gran impacto y unas ventajas y resultados excelentes. No obstante, los pacientes no llevan a cabo los cambios propuestos por múltiples razones, y por eso la educación será la clave en la intervención de Enfermería. Conclusiones. Se ha demostrado la determinante influencia que tiene el estilo de vida en la salud de los pacientes fomentando un buen pronóstico y evolución de la enfermedad. La clave para lograrlo la tiene la educación al paciente y los familiares. Existe la necesidad de seguir investigando sobre el tema por la falta de evidencia y de estudios.