Este trabajo analiza el impacto económico del conflicto entre Rusia y Ucrania, abordando sus repercusiones en ambas economías y en los mercados globales. Se examinan las sanciones económicas impuestas a Rusia y su capacidad de reconfigurar su comercio exterior, así como los daños sufridos por Ucrania, particularmente en su sector agrícola. Se estudia la volatilidad en los mercados energéticos y agroalimentarios y su impacto en la inflación mundial, destacando la interdependencia de la economía global. El estudio concluye que la guerra ha acelerado transformaciones en el comercio internacional y en la seguridad energética, impulsando la búsqueda de fuentes de energía alternativas. Finalmente, se identifican efectos en la inflación europea y en la estabilidad de los mercados financieros.
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