La violencia de género es un problema social que se desarrolla en las sociedades patriarcales y por la cual se somete a la mujer en base a las diferencias de poder que se dan entre géneros. Tradicionalmente este tipo de violencia estaba limitado a las relaciones matrimoniales, pero con la instauración de la postmodernidad los menores inician sus relaciones de pareja cada vez a edades más tempranas y con ellas, en ocasiones, el maltrato. El abordaje judicial de estas situaciones es complejo, pues ha de primar siempre el interés superior del menor. De esta manera, en muchas ocasiones las medidas sancionadoras no son proporcionales a la gravedad de los hechos cometidos. Sin embargo, la legislación española establece medidas de protección a la víctima que son analizadas en el presente trabajo.
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