Análisis estadístico de las viviendas de uso turístico en España

Abstract

El turismo es un fenómeno cultural, social y económico que engloba las actividades con fines profesionales, personales o de negocio que efectúan las personas fuera de su entorno, a través de sus viajes y permanencia en diversos lugares (UNWTO, 2021). En base a las preferencias del consumidor, podemos diferenciar distintos tipos de turismo. En cuanto a los más habituales, destacan el turismo de sol y playa, turismo cultural, turismo religioso, turismo de montaña o el turismo rural, entre otros. No obstante, se han ido desarrollando otras tipologías de turismo con otros objetivos como pueden ser el turismo gastronómico o el ecológico, entre otros. La actividad turística ha ido evolucionando con el paso de los años. Hoy en día, ha ido desarrollándose hasta convertirse en uno de los sectores que mayor crecimiento ha sufrido en el mundo, en diversos países y localizaciones. Sin embargo, ha seguido destacando por su creciente diversificación y expansión. Su gran auge se debe principalmente a dos factores: por un lado, un público cada vez más exigente que provoca una mayor rivalidad entre los destinos turísticos y, por otro lado, una oferta globalizada (Nieto González et al, 2016). Centrándonos en España, el turismo siempre ha tenido una gran aportación en la economía del país según Statista (2022), alrededor de 84 millones de turistas procedentes de otros países decidieron visitar España en 2019, alcanzando unas cifras que antes no se habían logrado. Sus principales mercados son Francia, Alemania y Reino Unido. De estos países procede más del 50% de nuestros visitantes anuales. En España, casi el 75% del Producto de Interior Bruto (PIB) procede del sector terciario. Prueba de ello son sus cifras en 2019, antes de la pandemia, donde el PIB ligado a este sector supuso el 12,4% del total, llegando a los 154.487 millones de euros. Además, se situó como un sector con una gran fuerza laboral, acumulando un 12,9% del total del empleo y alcanzando los 2.72 millones de puestos laborales en el país. Gracias a todos estos datos, el PIB del país entre 2012 y 2021 ha tenido un gran ascenso hasta la llegada de la pandemia mundial que supuso un punto de inflexión en el turismo en 2020. Desde 2006, el PIB se había mantenido por encima de los cien mil millones de euros, alcanzando cifras estratosféricas como en el periodo 2017-2019, situándose por encima de los 47.000.000.000 de euros.

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Sin embargo, con la llegada de la crisis sanitaria derivada del COVID-19, este sector se vio fuertemente afectado. Debido a la pandemia, se produjo una caída histórica en sus cifras, como fruto de la prohibición de la movilidad, el confinamiento y la falta de oferta turística derivada de los dos motivos anteriores. La crisis sanitaria tuvo su origen en marzo 2020 y en los meses siguientes, se registraron unos datos de turismo nulos donde la fuerte consolidación de este sector se vio en peligro. Gran parte del crecimiento de este sector es fruto de los avances en tecnología y la digitalización del sector. Además, el comportamiento de los turistas se ha visto modificado por el desarrollo de Internet, o grandes plataformas como P2P (peer-to-peer). Estas últimas se encargan de poner en contacto al cliente con el ofertante, de tal manera que se adquiere un producto o servicio de forma directa sin intermediarios de por medio (Fernández, 2016). Partiendo del gran impacto que tienen las viviendas de uso turístico en España y la gran relevancia que están consiguiendo en la sociedad, este trabajo plantea una serie de objetivos acorde con su repercusión. Basándonos en diferentes análisis estadísticos, nuestro principal objetivo se va a centrar en un análisis del perfil de los usuarios que solicitan estos alojamientos, así como sus características y por qué recurren a este tipo de alojamiento. Además, realizaremos un estudio estadístico de la evolución y diferentes aspectos de las viviendas de uso turístico que han provocado su consolidación en el mercado.