Los cambios geopolíticos, a nivel internacional y regional, han dado lugar a un cambio de paradigma sobre la necesidad de acelerar la ampliación de la Unión Europea hacia el este, especialmente hacia los Balcanes. Fruto de este cambio sería la cumbre de Granada, una concentración de líderes europeos que ha marcado un punto de inflexión en la dirección de la política de ampliación. Por ello, el presente artículo intenta explicar ese cambio de posición, un viraje que, seguramente, marcará el porvenir de la Unión durante la próxima década.
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