La introducción de tecnologías en la enseñanza del inglés ha revolucionado el aprendizaje con herramientas digitales como pizarras interactivas y aplicaciones educativas, ofreciendo nuevas oportunidades para mejorar las habilidades lingüísticas. Sin embargo, también presenta desafíos como la sobreestimulación, la reducción de la creatividad y la capacidad de atención, junto a la posible dependencia de los estudiantes en las herramientas digitales. Este análisis indaga en las consecuencias de la tecnología y las pantallas en la educación del inglés, considerando diversas perspectivas y estudios para desarrollar estrategias efectivas y equilibradas en su uso.
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