Las actitudes intolerantes es algo que siempre ha existido en la sociedad y de lo que no todas las personas son conscientes. Este Trabajo de Fin de Grado pretende mostrar la relevancia que tiene una educación en valores desde la primera etapa educativa, para que exista una buena convivencia tanto dentro del aula como en la sociedad. La educación afectiva y emocional juega un papel fundamental a la hora de gestionar las emociones de una forma positiva. Se busca el fomento e impulso hacia actitudes de tolerancia que permitan convivir como personas humanas y racionales que somos.
En el presente trabajo se realiza una investigación y acercamiento hacia todos estos aspectos, sus efectos e importancias, así como una propuesta de intervención basada en los valores de tolerancia y no discriminación como elemento preventivo de actitudes de rechazo hacia los demás.
