La inteligencia emocional en el aula de Educación Infantil. Propuesta de intervención

Abstract

La inteligencia emocional se define como la capacidad de percibir, reconocer, expresar y regular las emociones, para un posterior empleo de ellas como ayuda para resolver problemas y conflictos. Por ello, se relaciona con la psicología positiva formando parte de ella, ya que se emplean los elementos claves de esta última, es decir, las fortalezas, las emociones positivas y las relaciones positivas, para alcanzar la regulación de las emociones propias y ajenas (Salovey y Mayer, 1990). La inteligencia emocional es clave en el proceso de enseñanza – aprendizaje de la educación, puesto que gracias al aprendizaje de autocontrol y de la regulación emocional, los niños pueden alcanzar sus logros de una manera más plena, de forma que ellos sienten mayor satisfacción ante sus éxitos. Una vez contextualizada la inteligencia emocional, se ha diseñado una programación que consta de doce sesiones en las cuales se enseña al alumnado a identificar, representar y por último, regular las emociones. La metodología empleada en ella se relaciona con el aprendizaje significativo, desde un punto de vista globalizador, y atendiendo a todas las dificultades que se presenten en el aula. Por último, se establecen una serie de conclusiones a las cuales se han llegado una vez finalizado el trabajo.

Emotional intelligence is defined as the ability to perceive, recognize, express and regulate emotions, for later use as an aid to solve problems and conflicts. For this reason, it is related to positive psychology being part of it, since the key elements of the latter are used, such as, strengths, positive emotions and positive relationships, to achieve the regulation of one's own and other people's emotions (Salovey & Mayer, 1990). Emotional intelligence is key in the teaching process - learning process of education, since thanks to the learning of self-control and emotional regulation, children can reach their achievements in a fuller way, so that they feel more satisfaction for their successes. Once emotional intelligence has been contextualized, a program has been designed consisting of twelve sessions in which students are taught to identify, represent and finally regulate their emotions. The methodology used in it is related to meaningful learning, from a global point of view, and taking into account all the difficulties that may arise in the classroom. Finally, a series of conclusions are established which have been reached once the work has been completed.