Repercusión psicológica y social de los padres y madres de niños malos comedores. La visión del pediatra.

Abstract

Objectives. To estimate the parents´ stress when their child has a feeding problem (FP), the repercussion on the family psychological health status, as well as to know the paediatrician's point of view. Methods. Two independent studies were conducted. 1) Case (FP) control study (healthy controls and controls with digestive disorders or sick controls). Parental stress and quality of life in these families were assessed using validated scales (Parent Stress Index Short Form [PSI-SF] and Goldberg's General Health Questionnaire [GHQ-28]. 2) A survey of paediatricians' opinions. Results: 1) 238 parents´ surveys were collected; 102 from healthy controls, 88 with digestive disorders and 48 from FP. Almost half of the FP parents disagreed with their paediatrician. More than half acknowledged problems in their social, work and family life, with psychological impact according to the GHQ-28 scale: 54.2% according to baseline values (adjusted odds ratio [ORa] vs healthy controls 4.18, 95% confidence interval [95% CI95%] 1.96-8.87; vs diseased controls ORa 6.25, 95% CI95% 2.79-13.98) and 33.3% according to our healthy controls. They also had higher stress scores (PSI-SF) than healthy controls (adjusted mean difference [MAD] 21; 95%CI 12.19-29.81) and sick controls (MAD 20; 95%CI 9.81-30.19). 2) 211 surveys were collected from pediatricians: 90% of them acknowledged the psychological impact on parents, but less than half advised them professional assessment. They consider their concern to be excessive, which is the main reason for referral to a specialist. Almost half of them recognize that families are not satisfied about the consultation. The diagnostic criteria are known by only 61.1% of them. Conclusions. Parents of FP children have high levels of stress and risk of anxiety and depression, with repercussions at the social, family, couple, and work levels. In addition, the relationship with the paediatrician may be affected.

Objetivos: Estimar el estrés de padres y madres cuando su hijo es mal comedor (MC), la repercusión sobre el estado de salud psicológica familiar y conocer la opinión del pediatra. Métodos: Se realizaron 2 estudios independientes. 1) Estudio de casos (MC) y controles (sanos, y con trastornos digestivos o enfermos). Se evaluó el estrés parental y la calidad de vida familiar mediante escalas validadas (Parent Stres Index Short Form [PSI-SF] y General Health Questionnaire de Goldberg [GHQ-28]. 2) Encuesta de opinión a pediatras. Resultados: 1) Se recogieron 238 encuestas a padres; 102 de controles sanos, 88 con trastornos digestivos y 48 de MC. Casi la mitad de los padres de MC estaban en desacuerdo con su pediatra. Más de la mitad reconocen problemas en su vida social, laboral y familiar, con repercusión psicológica según la escala GHQ-28: un 54,2% según valores de referencia (odds ratios ajustadas [ORa] frente a controles sanos 4,18; intervalo de confianza del 95% [IC95%]: 1,96-8,87; frente a controles enfermos ORa 6,25; IC95% 2,79-13,98) y un 33,3% según nuestros controles sanos. Asimismo, presentaron mayores puntuaciones de estrés (PSI-SF) que los controles sanos (diferencia de medias ajustada [DMA] 21; IC95% 12,19-29,81) y controles enfermos (DMA 20; IC95% 9,81-30,19). 2) Respondieron 211 pediatras: el 90% reconoce la repercusión psicológica en los padres, pero menos de la mitad les aconseja valoración profesional. Consideran excesiva su preocupación, que constituye el principal motivo de derivación al especialista. Casi la mitad, reconoce que las familias se encuentran poco o nada satisfechas al salir de la consulta. Los criterios diagnósticos son conocidos sólo por el 61,1%. Conclusiones: Padres y madres de los MC tienen niveles elevados de estrés y riesgo de ansiedad y depresión, con repercusión a nivel social, familiar, de pareja y laboral. Además, la relación con el pediatra puede verse afectada