Intoxicaciones agudas por cocaína: caracterización, factores de riesgo, conocimientos y precauciones de los consumidores

Abstract

La cocaína es la tercera droga ilegal más consumida después del cannabis y las anfetaminas. España es uno de los países donde su consumo está más extendido, sobretodo en el grupo de adultos jóvenes de 15-34 años. Los problemas de salud asociados al consumo de cocaína son frecuentes (13%-30%) entre los consumidores, aunque la intoxicación aguda por cocaína así como sus factores de riesgo no se han estudiado tanto como en el caso de la sobredosis por heroina. Existen vacios en la literatura sobre los factores de riesgo y sobre el conocimiento que tienen los usuarios sobre ellos y comportamientos del riesgo para evitarlos. Objetivos: estimar la prevalencia de Intoxicación Aguda por cocaína así como sus características y factores de riesgo asociado, con especial relevancia del efecto dosis respuesta y el consumo de alcohol previo al evento. Por otra parte se exploró el conocimiento de estos factores de riesgo desde el punto de vista del usuario, y en qué medida los consumidores han realizado alguna acción para evitarlos. Metodo: Cohorte de 720 jóvenes usuarios de cocaína de forma habitual y reciente, y no consumidores de heroina de forma regular, que fueron captados desde escenarios diferentes a los servicios asistenciales, residentes en Madrid, Barcelona o Sevilla. Los datos de entrada en la cohorte analizados se recogieron a través de un extenso cuestionario administrado por personal entrenado apoyado por ordenador (CAPI). Se estima la prevalencia de Intoxicación Aguda (IA), se describen las características clínicas observando las diferencias por sexo y ciudad de residencia con el test de Chi cuadrado de pearson (p<0,05). Se construye una regresion logística para estudiar los factores asociados y un analisis casecrossover para estudiar el efecto del aumento de dosis en las cuatro horas anteriores al evento como desencadenante de la Intoxicación aguda por cocaína y el efecto del consumo de grandes cantidades de alcohol previo. Se recoge a través de preguntas cerradas y abiertas las razones por las que los usuarios creen que se han producido la IA en el grupo que la sufrieron y a toda la muestra sobre porque se producen los problemas agudos de salud en general. Tambien se pregunta de forma abierta si en el año anterior a la entrevista realizaron alguna accion para evitar estos problemas. A través de una regresión logística se identifica el prefil de aquellos consumidores que más frecuentemente adoptaron alguna acción que reduce los factores de riesgo de IA. Resultados: el 91,7% de la muestra consumen cocaína via intranasal y el 74,6% son bebedores de alto riesgo. La prevalencia de IA en el último año fue de 21%. El riesgo de IA aumenta 35 veces en las cuatro horas posteriores al consumo si se consume 0,5g o más cuando de forma habitual se consumía menos, se mantiene este incremento del riesgo en los consumidores regulares y en los bebedores de alto riesgo, y se incrementa si han consumido grandes cantidades de alcohol previo al evento. Solo el 12% de la muestra menciona dos o más razones que coinciden con los factores de riesgo conocidos hasta el momento y el 29,6% ha practicado alguna precaución en el año anterior a la entrevista para evitarlo. La mayoría van enfocadas a la disminución de la dosis y solamente el 0,4% ha reducido el consumo de alcohol. El principal factor asociado a haber adoptado precauciones es haber tenido contacto con tratamiento especializado y no se asocia el haber visitado a un médico general o de urgencias. Conclusiones: La Intoxicación aguda es frecuente entre los usuarios de cocaína. El aumento de la dosis es un desencadenante de la IA, así como el consumo de grandes cantidades de alcohol previo al evento. La mayoría de los usuarios desconocen los factores de riesgo de la IA por cocaína y no adoptan precauciones para evitarlos. Es necesario el desarrollo de estrategias preventivas dirigidas a la reducción del daño en este grupo mayoritario de consumidores de cocaína en polvo y preferentemente via intranasal.